** Playa **

*Conseguí llegar a la playa de Port Angeles. La había visto el otro día desde la moto de Eimi, y era la única playa que sabía dónde quedaba.
Llegué a la arena, dejé mis zapatos y me quité la camiseta. Y fui corriendo al mar.
Al estar el día nublado, no me sorprendía que no hubiera mucha gente en la playa, y eso era mejor. Así no se daban cuenta si alguien no salía del agua para respirar*

Habia pasado mucho tiempo sin ver un lugar tan hermoso, por alguna razón esta playa me parecia más bella que la de Australia.
Estaba en el coche asi que tuve que estacionarlo para poder bajar hasta la playa. caminé por el borde del agua sin miedo a mojarme y me deje llevar por aquel mágico lugar.
De pronto me di cuenta de que algo se movia bajo el agua - ¿quien podría querer bañarse en un dia tan nublado? - me preguntaba mientras observaba el lugar exacto del movimiento.

*Después de un rato sumergido, me di cuenta de que no estaba solo en el agua. Que extraño! El día estaba nublado y habían olas. "Quién querría, a parte de los surfistas, nadar en estas aguas?" me pregunté. Salí a la superficie y me fijé en una joven. Por su aroma, era una vampira.
Me acerqué a ella nadando para saludarla, por si la asustaba con mi repentina aparición* Hola, soy Nate. *me presneté* No esperaba compañía un día como hoy. Vives aquí o estás de paso?

Me hallaba muy distraída así que la repentina aparición de un vampiro me sobresalto más de lo debido. No sabia si era de fiar o no, pero cuando se presentó tan amablemente no lo pude dudar más, él era pacífico.
- a mi el día me parece bellísimos - le diie sonriente – mucho gusto, soy Kim.

*Le sonreí* El gusto es mio *le dije* y qué haces por aquí? De vacaciones? *pregunté*

- no exactamente... la verdad es que viajo mucho, no tengo un lugar fijo en el cual estar, supongo que viajar es parte de mi - dije mirando al mar - a veces es un fastidio no tener un lugar propio.

*la escuché atentamente. Era una viajera, como yo. Con la diferencia de que yo tenía un techo propio* Oye, y tienes dónde quedarte? *pregunté*

por fin encontraba a alguien que bn asi q decidi presentarme
-hola soy alexa pero me gusta que me dijan alex como estan?-estava nerviosa

- No , ninguno - le respondí
De pronto escuche la voz de otra vampira.
- mucho gusto Alex -

*Vi que también se nos unía otra vampira y me giré hacia ella* Hola, Alexa. Encantado. *Volví a girarme a Kim* Pues yo tengo una residencia en Forks. Vivo solo. Pero si no te molesta la compañía, podríamos compartirla *le sugerí*

- ¿compartir tu casa? - repetí pensativa - pues no suena como una mala idea - sonreí - me encantaria tener un lugar donde poder pasar un tiempo... viajar tanto resulta algo molesto.

al escuchar lo que dijieron decidi irme supuse que querian estar solos
ciao fue un placer conocerlos- y me retire

*Me puse a pensar en qué pensaría Eimi respecto a que llevara a otra mujer a mi casa, pero no la iba a dejar desamparada. Y mi casa era muy grande para mi solo* Pues, yo también soy nuevo por aquí. Me he dedicado a viajar mucho, pero compré una casa en Forks para ver cómo era vivir más relajado en un solo lugar*le expliqué* Y qué te trajo por aquí?

- mmm... podria decirse que el destino - sonreí ante lo tonto que sonaba - no se muy bien que me trajo hasta aqui, decidí hacerlo cuando estaba en el aeropuerto, supongo que sonará algo tonto.

*Me gustaba charlar. Para variar. Últimamente había pasado un tiempo de mucha soledad* Y de dónde vienes?

- De Sudamerica, no sabes cuanto extraño estar por alla... - de verdad extrañaba mi tierra natal - bueno, no me quiero poner melancolica... -sonrei - ¿y tu? ¿de donde eres?

Pues no soy de ningún sitio. Siempre he vagado de aquí para allá. Antes de llegar aquí estuve por Manhattan *le expliqué* Pero me gusta este sitio. Creo que me quedaré un tiempo. En realidad vine porque quería conocer a una familia de vampiros. Pero hay más gente en el pueblo que me caen bien *le dije*

- ¿y que tal se te da la vida estable? ... tengo miedo de que por haber estado tanto tiempo vijando ahora ya no me guste vivir como las personas normales...

*Me puse a reflexionar sobre la vida estable. En verdad no podía explicarle mucho poque casi no había pasado tiempo en mi casa desde que llegué* Pues, si te digo la verdad, no llegué hace mucho y he estado la mayor parte del tiempo de aquí para allá. A ver si ahora que tengo compañía, lo compruebo. Cuando llegué, una vampira muy amable me dejó quedarme en su casa, y la mayor parte del tiempo la he pasado con ella, pero se fue de viaje y desde entonces estoy de aquí para allá. Sin muchas ganas de volver a casa *le expliqué algo melancólico*

- pues vamos a conocerla - le anime - podemos descubrir juntos que tal nos va eso de la vida común... tal ves sea más placentera de lo que pensamos. Recuerda que todo se lleva mejor de a dos.

*sonreí* Pues vamos. *le dije* Lo que... no tengo coche. Vine corriendo desde el bosque. Lo siento *me disculpé*

- correr me encanta... a que te gano una carrera - le reté sonriente.

*Ahora me reí ante la idea* Adoro los retos, pero no sabes dónde vivo. Sería un reto muy fácil

- bueno, yo habia pensado en una carrera más corta pero supongo que asi no seria divertido - pensé en ello por un momento - Bueno, vamos a tu casa - agregué.